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El gran crecimiento que ha experimentado el sector de la podología en los últimos años, ha incrementado que nuevas clínicas abran sus puertas y, por tanto, la competencia en el sector aumente.
Analizando la evolución del número de colegiados en España, observamos que en los últimos 20 años el número de podólogos colegiados ha aumentado más de un 250%.
Fuente: Instituto Nacional de Estadística
Todo esto, sumado al cambio cultural que ha experimentado España en torno a la asistencia al podólogo, ha hecho que este mercado crezca a un ritmo vertiginoso.
La demanda de tratamientos podológicos, estudios de la pisada, el aumento de corredores…. se ha disparado en los últimos años, pero la oferta también, teniendo que adaptarse a esta nueva situación y ajustando los precios para atraer clientes, o simplemente, fidelizarlos.
Por otro lado, el nuevo modelo de consumo, la digitalización y que los consumidores son cada vez más abiertos a otras marcas y empresas, han supuesto la necesidad de adaptación de todos los sectores, pero ¿esto afecta también al sector podológico? ¡La respuesta es sí!
Según un estudio publicado por Google, el 82% de las compras que se realizan pasan antes por internet. Este estudio trata del sector retail pero puede servirnos como esbozo para entender cómo son hoy en día los consumidores, en nuestro caso, los pacientes.
La digitalización y el aumento del uso de las redes sociales han facilitado que el paciente tenga mayor capacidad para comparar clínicas y precios. Además, éstos son más proclives a moverse y a cambiar de clínica si no están contentos con algún aspecto.
¿Cómo afecta todo esto a la clínica podológica?
En líneas generales, la exigencia es mucho mayor y esto incentiva a la clínica a ser más competitiva, activa en Internet y en las redes sociales, a disponer de una buena página web que cautive y atraiga a pacientes, ofrecer tratamientos modernos y actualizados y a favorecer el boca-oreja positivo de cualquier paciente que salga por la puerta. Una mala crítica en Internet puede suponer la pérdida de un gran número de pacientes.
No obstante, una vez el paciente ha apostado por una clínica concreta y ha depositado su confianza en ella, los motivos que le pueden llevar a cambiar son, entre otros:
- Cambios de domicilio del paciente.
- Falta de higiene, desorden o suciedad en las instalaciones.
- Falta de comunicación con el podólogo o con el equipo de clínica en general.
- La modificación de sus citas sin motivo aparente.
- Los tiempos de espera antes de ser recibidos.
- El resultado no es el que esperaba.
- La duración del tratamiento está siendo mucho mayor de la que creía.
- El tratamiento ha tenido sobrecostes y el paciente ha perdido la confianza.
- Los cambios de personal en la clínica.
- Comentarios negativos de otros pacientes o entre el personal de la clínica.
El auge de las clínicas podológicas hace replantear al podólogo adquirir nuevas ideas y métodos para atraer al paciente a sus clínicas y no se vaya a la competencia. Es fundamental ligar estos tres conceptos: profesionalidad, eficiencia y cercanía. Si no te conocen no es suficiente sólo ser profesional, ya que no podrán acceder a tus servicios.....
Saber como atraer pacientes a tu clínica podológica es el primer paso para conseguir esa clientela fija, satisfecha y que ya haya creado vínculo con tus servicios.