¡Inicia sesión!

Fleecy, Moleskines y Fieltros: qué, cuándo y cómo

Como podólogos, sabemos que la protección y descarga de presiones en el pie son cruciales para el confort y la salud de nuestros pacientes. Elegir el material adecuado (fieltro, moleskin o fleecy) es una decisión técnica que depende de varios factores. Aquí podrás tomar la mejor decisión en tu práctica clínica.

¿Cuál es la diferencia principal entre estos materiales?

La diferencia radica en su composición, grosor y función. En términos sencillos:

  • El fieltro de lana es grueso y denso, ideal para descargar presiones puntuales y profundas, como las de una hiperqueratosis plantar focal.
  • El moleskin es un material muy fino y conformable, perfecto para la protección superficial en zonas de poco volumen, como el dorso de los dedos en calzado ajustado.
  • El Fleecy Web es un tejido afelpado con gran elasticidad, diseñado para el acolchado y la protección de pieles sensibles, especialmente tras una quiropodia o en rozaduras difusas.

¿Cuándo debo usar el fieltro de lana?

El fieltro de lana es tu mejor aliado cuando necesitas absorber y redistribuir la presión de una zona específica. Es el material de elección para confeccionar descargas metatarsales en forma de herradura o en "U", donde el objetivo es liberar la presión sobre la cabeza de un metatarsiano o una callosidad. Su capacidad de compresión lo hace muy eficaz.

¿Por qué no usar moleskin para todo si es tan fino?

Aunque el moleskin es excelente para la protección superficial y en espacios reducidos, su grosor mínimo no le permite ofrecer una descarga significativa. Si bien protege contra la fricción, no es adecuado para aliviar la presión en zonas de alta carga. Su principal fortaleza es evitar rozaduras leves sin añadir volumen dentro de un calzado estrecho.

¿En qué casos el Fleecy Web es la mejor opción?

Opta por Fleecy Web en situaciones donde la piel es frágil o ya está irritada. Su textura suave y afelpada lo convierte en la mejor opción para la protección post-quirúrgica, en ampollas o en pacientes con piel muy sensible. Además, su elasticidad permite que se adapte perfectamente a zonas curvas como el talón, donde puede usarse como un almohadillado anti-fricción dentro del propio calzado.

¿Qué errores de aplicación debo evitar?

Los errores más comunes están relacionados con la técnica:

  • No limpiar la piel: La zona debe estar completamente limpia y seca antes de la aplicación. La humedad o los restos de crema impiden que el adhesivo se fije correctamente.
  • No biselar los bordes: En el caso del fieltro, los bordes rectos pueden causar un efecto de corte y crear nuevas áreas de presión. Siempre redondea y bisela los perímetros.
  • Usar demasiado grosor: Si el calzado del paciente es ajustado, un fieltro muy grueso puede aumentar la presión en lugar de aliviarla. En estos casos, es mejor elegir Fleecy Web o Moleskin.
  • No probar la descarga: Siempre haz que el paciente camine unos segundos para verificar el confort y el ajuste. Si hay pliegues o incomodidad, es necesario reajustar.

¿Algún consejo final para la consulta?

La elección del material de descarga es un arte y una ciencia. Dominar las propiedades del fieltro, moleskin y Fleecy Web te permitirá ofrecer soluciones precisas y personalizadas a cada paciente. Recuerda que no se trata solo de aplicar un parche, sino de restaurar la biomecánica del pie y mejorar la calidad de vida.

Siempre documenta tu trabajo, toma fotografías del molde que has diseñado y registra los grosores utilizados. De esta manera, podrás replicar el éxito en futuras visitas y seguir perfeccionando tu técnica. La práctica hace al maestro, y cada pie es una oportunidad para demostrar tu pericia.

¡Envia tus casos de éxito a marketing@namrol.com! Tu experiencia enriquece a toda la comunidad podológica.

Producto añadido a tu lista
Consentimiento de cookies